Ansiedad por separación
Este patrón se caracteriza por una necesidad excesiva de los niños de permaneces con las personas adultas que los cuidan y una reticencia intensa a separarse de ellas. A pesar de que este patrón es típico de los niños pequeños de 12 a 18 meses de edad, en cuyo casi no costituye un trastorno, no se espera de los niños en edad escolar.
El aspecto esencial del TAS es la ansiedad excesiva relacionada con la separación de las personas a las que está vinculado el niño (normalmente los padres y especialmente la madre) o con la separación del hogar o de otros familiares próximos. La edad de comienzo más frecuente del TAS se ha situado en la niñez media, entre los 7 y 9 años de edad.
Sus síntomas se manifiestan a nivel cognitivo (preocupación excesiva y persistente a perder las figuras de apego o a que les suceda algo malo), conductual (resistencia o rechazo a acudir a la escuela u otro lugar, negarse a dormir sólo o fuera de casa si no está cerca la figura de vinculación), y somáticas (dolores de estomago, cabeza, pesadillas recurrentes, náuseas, etc.).
Este problema de ansiedad puede indicar algunas dificultades en las relaciones entre padres e hijos o un problema real, como el ser abusado en la escuela. Ocasionalmente, el niño o niña puede hablar sobre sus razones para sentirse ansioso, dependiendo de su edad y de sus destrezas de lenguaje.