Trastorno de personalidad dependiente
Las personas con una personalidad dependiente transfieren las decisiones importantes y las responsabilidades a otros y permiten que las necesidades de aquellos de quienes dependen se antepongan a las propias. No tienen confianza en sí mismas y manifiestan una intensa inseguridad. A menudo se quejan de que no pueden tomar decisiones y de que no saben qué hacer o cómo hacerlo. Son reacias a expresar opiniones, aunque las tengan, porque temen ofender a la gente que necesitan. Las personas con otros trastornos de personalidad frecuentemente presentan aspectos de la personalidad dependiente, pero estos signos quedan generalmente encubiertos por la predominancia de otros rasgos. Algunos adultos con enfermedades prolongadas desarrollan personalidades dependientes.
Las personas que sufren este trastorno de personalidad no confían en su propia capacidad para tomar decisiones. Es posible que se sientan devastadas por la separación y la pérdida de alguien y pueden hacer lo que sea, incluso sufrir maltrato, con tal de conservar una relación.
Los síntomas del trastorno de la personalidad dependiente pueden abarcar:
- Evitar estar solo
- Evitar la responsabilidad personal
- Resultar fácilmente lastimado por la crítica o la desaprobación
- Enfocarse demasiado en los miedos de ser abandonado
- Volverse muy pasivo en las relaciones interpersonales
- Sentirse muy afectado desde el punto de vista clínico ante una ruptura o pérdidas relacionales
- Tener dificultad para tomar decisiones sin el apoyo de otros
- Tener problemas para expresar desacuerdos con otros
La psicoterapia se considera el tratamiento más efectivo. El objetivo es ayudar a que las personas con esta problemática hagan elecciones más independientes en la vida.