Pensamientos automáticos y bienestar emocional

La mayor parte de nuestras conductas son aprendidas, al igual que nuestros pensamientos y sentimientos. Esto quiere decir que también se pueden desaprender, modificar y aprender nuevas conductas, pensamientos y sentimientos, lo cual es útil si experimentamos malestar, sufrimiento emocional o dificultades de tipo psicológico. Estamos habituados a pensar de una determinada manera que nos parece correcta porque es la que llevamos realizando desde hace mucho tiempo, o la que hemos ido interiorizando en nuestro proceso de crianza, socialización y apertura al exterior, y una terapia psicológica puede ser útil a la hora de ayudarnos a reenfocar algunos aspectos.
La mayor parte del tiempo estamos pensando y hablando con nosotros mismos aunque no seamos conscientes de ello. En ocasiones nuestros pensamientos no reflejan adecuadamente la realidad, y eso nos lleva a experimentar emociones negativas desproporcionadas. Nuestras reacciones ante el estrés dependen en gran medida de nuestros pensamientos y creencias.
Estamos convencidos de que son los acontecimientos, los sucesos, los que crean nuestras emociones y conductas; estamos convencidos de que nuestras emociones son el resultado de las cosas que nos ocurren. Solemos creer que son las situaciones las que nos generan una respuesta emocional, "estoy bien porque he aprobado; estoy mal porque hemos discutido, etc.".
Sin embargo, nuestras emociones dependen de la interpretación que hacemos de la realidad. Realmente lo que suele ocurrir es que lo que pensamos acerca de los acontecimientos, de la gente, e incluso de nosotros mismos, nos produce ciertas emociones y nos hace comportarnos de una forma determinada, retroalimentando muchas de nuestras creencias aprendidas. 

Dada la importancia de los pensamientos y las creencias, los psicólogos incluimos una parte fundamental de la terapia a trabajar con ellos. Las creencias y los pensamientos pueden ser ajustados o distorsionados, pueden potenciarnos o dificultarnos nuestro bienestar emocional o nuestros objetivos. Establecer las características más habituales de estos pensamientos puede ser útil para ayudar a su identificación y posterior control.

Puedes aprender más sobre ello y sobre cómo puedo ayudarte en Psicólogo Salamanca - Terapia Cognitivo Conductual. 

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